Los estadounidenses despertaron del sueño a los guineanos
El partido arrancó con esperanzas en Guinea, una selección que venía de ganar a China y que soñaba con ganar al terror de las canchas de baloncesto, Estados Unidos. Algo que a priori podía parecer difícil, pero que los chicos de Ibrahima Toure vieron muy de cerca la opción de hacerse con el partido, pero finalmente se impuso el juego avasallador de los americanos en la pintura, completándolo con acierto exterior. Donde Guinea tendrá la posibilidad todavía de colarse como segunda de grupo si ganase a Francia tras la jornada de descanso.
Estados Unidos es considerada una de las mejores selecciones y así lo ha demostrado en los distintos mundiales, en esta ocasión los chicos de Sharman Lamar arrancaron el partido sabiendo el rival al que se enfrentaban, pues, a pesar de ser el primer debut en un Mundial U17 de los africanos la selección de Guinea entro en el día de ayer pisando fuerte y hoy podrían dar un susto a los americanos. El partido arrancó con una Guinea ausente frente a la fortaleza estadounidense, encajando un parcial en contra de 8-20, lo que obligó a Ibrahima Toure a pedir un tiempo muerto. Minuto que cambió la prespectiva de los chicos de Guinea, que consiguieron dejar a 28 puntos a los americanos. Buena defensa de los guineanos, que consiguieron secar a los vigentes campeones. Cerrando un primer cuarto con un menos catorce y viendo posible acercase más en el marcador.
El segundo cuarto arrancó de la misma manera con la que empezó el partido, una Guinea poco acertada en los pases, cometiendo gran cantidad de pérdidas y dando oportunidades a los estadounidenses que no perdieron ninguna de las oportunidades que estos le dejaron. Haciendo que la diferencia en el marcador aumentara hasta los treinta y seis de diferencia, con un marcador de 23-59 favorable para Estados Unidos. Tras hablar con los aficionados que eran más de 2.800 los guineanos hicieron caso a su seleccionador y siguieron animando. Algo que los aficionados al baloncesto y los propios americanos reconocieron. Destacando la presencia de alguno de los jugadores de la selección africana, Edvar Srdic, aficionado al baloncesto, aseguró que: "El cambio psicológico de cuando Dianne sale a pista es muy grande. Buena presencia, gran jugador".
Koa Peat, jugador de la selección de Estados Unidos @FIBA
Tras volver del descanso, Arafan Diane continuó aumentando su renta personal y los estadounidenses bajaron el nivel en la pista. Algo que no gustó al seleccionador, Sharman Lamar quien solicitó un tiempo muerto y pidiendo defensa a sus jugadores y respeto por el rival. Que no estaban mostrando al no querer defender bien. Josefina Alcázar, aficionada al baloncesto, destacó: "La defensa de Estados Unidos desapareció en el tercer cuarto y es normal que Sharman Lamar pidiera tiempo muerto". El baloncesto de canteras, se fundamenta en la formación de futuras estrellas, por eso es tan importante tener seleccionadores que guíen a los niños y niñas. Por ello, los chicos americanos hicieron caso a su entrenador y empezaron a trabajar en ambos lados de la cancha.
Los últimos diez minutos fueron decisivos para mostrar la valentía y arrojo de la selección de Guinea, que no dejó de luchar en ningún momento del partido. Una actitud que en este caso sí devolvieron los estadounidenses durante todo el cuarto, para terminar con una contundente victoria de más 75 haciendo que el marcador quedara 49-124. Una selección americana que en este segundo partido de la serie de grupos sí tuvo acierto en la línea de tres, consiguiendo anotar 6 de los 22 que tiraron. Bajo el bajo acierto de los triples, los estadounidenses lo compensaron con el 71% de acierto en los tiros libres y el 62% de tiros de dos anotados.
