Carnevale y Luigi rompen el sueño puertorriqueño

El principal problema de los puertorriqueños no fue el nivel en esta ocasión el partido se decidió por la altura de la que carecían y los fallos que cometieron con respecto a los que los italianos cometieron que fueron los que menos. Un encuentro donde de nuevo Felipe Quiñones brillo con luz propia, anotando, defendiendo y repartiendo juego a unos chicos que dieron todo para hacerse con el pase a semifinales. La clave del partido contra los europeos era correr, un tipo de juego en el que Puerto Rico no es capaz de competir. Lo que hizo no poder bajar de la diferencia de los diez punto y por tanto colarse en la semifinal Italia. 

El primer cuarto fueron minutos muy parejos, de intercambio de líder. Con fallos por parte de ambos conjuntos. Unos primeros minutos donde Luigi Suigo le robó el protagonismo a su compañero de equipo, haciéndose grande en defensa, consiguiendo hacer varios tapones. Lo que motivó a un tal Francesco Carnevale que anotó dos triples consecutivos poniendo a Italia 7 arriba para finalizar los primeros minutos de partido. 

Los siguientes 10 minutos dieron comienzo de una manera peculiar, tras recibir una falta técnica que permitió a Puerto Rico acercarse en el marcador. Hasta que de nuevo apareció Carnevale para tranquilizar a los suyos, aumentando la diferencia y haciendo pasar el partido por banquillos. Con tiempo muerto solicitado por Eddin Santiago, el cuerpo técnico consiguió darles confianza a los suyos, para calmar el partido y poder llevárselo a su terreno recortando la diferencia. Apareciendo de nuevo Carnevale para poner la guinda de la primera mitad con 3 de 4 triples anotados y dos de ellos en el final de los cuartos, dando ventaja a su equipo y dejando atrás la confianza aportada del cuerpo técnico de Puerto Rico.

Carnevale jugador Italiano y pieza clave del inicio de la ventaja italiana. @FIBA

Con seis puntos de diferencia en el marcador, la segunda mitad daba comienzo en el Sinan Erdem Dome, con los italianos liderados por Carnevale en el tiro exterior y Luigui en la pintura. Dos jugadores que demostraron gran poderío, que sumado a las malas decisiones tomadas por los puertorriqueños, llevaron la diferencia a 10 puntos. Eddin Santiago, pidió tiempo muerto, muy enfadado por la actuación de sus jugadores. Unos chicos que lo intentaban, Eddin Santiago: “Dejar de jugar difícil y de intentar cosas imposibles. Concentración y cosas fáciles. Dejar de perder balones y hacer nuestro juego”. Algo que a priori no  caló en los suyos pues cometieron 3 pérdidas al salir del banquillo, sumado a malos balances defensivos. Aun así, los diez se mantenían en el marcador.

Los puertorriqueños arrancaron los 10 últimos minutos con una jugada fuera de serie, pero tras unos primeros minutos buenos por parte de los chicos. La fuerza se fue apagando según Felipe Quiñones se iba enfadando con los árbitros, por las decisiones que estos tomaban con las acciones del partido. La clave del encuentro estuvo en la altura de los italianos. 

Pues la pieza para poder ganar a esta selección europea, es correr. Algo que a los latinoamericanos no se les da bien. Lo que les obligaba a hacer la mayoría de jugadas en estático y sin la altura que los italianos si precisaban. Tanto fue así que Luigi estuvo en pista 21 minutos.

El último minuto se volvió una pesadilla para los puertorriqueños, que tras verse diez abajo, Lonatti se apuntó a la fiesta triplista, no se hizo notar la ausencia del pívot italiano. Pasando a semifinales con una diferencia de 18 puntos.